ÚLTIMA VEZ
EL martes nos reunimos en casa para celebrar la despedida de las brasileras y de todos quienes están próximos a partir. Como era de esperar apareció el guardia de seguridad y acabó todos los festejos. Además el exagerado llamó a la policía porque uno de los ingleses lo tomó del brazo.
El miércoles fue el último día de trabajo. Me despedí de todos mi compañeros y de mi jefe incluido. Me agradeció y felicitó por mi desempeño y yo aproveché para decirle que al principio se me hizo díficil y triste trabajar con él. Un cliente se acercó a saludarme y discretamente puso dinero en mi mano. Me hizo recordar cómo solía actuar mi abuelo.
Hoy nos levantamos y fuimos a hacer unos trámites al hotel y de ahí a esquiar. Nos tomamos fotografías con nuestro staff y finalmente dijimos adiós a todos. Fue triste el momento en que nos despedimos de Doreen porque ella fue una de las personas más influyentes en nuestra estadía. Por otra parte, estos tres meses fueron suficientes como para formar sólidos lazos de amistad. Por eso cuesta despegarse de las personas cercanas.Ahora me siento como un bebé cuando tiene sueño y se pone cascarrabias, porque la verdad que estoy de mal humor. Tengo ganas de irme a dormir, pero a su vez quiero ir a Fabyans a despedirme de alguna gente y tengo que armar las valijas.
Lo bueno es que mañana a esta hora vamos a estar bien lejos de la nieve!