BASTA
Alguna vez escuché decir a alguien que el trabajo que tenía era lindo porque no tenía que hacer nada. En total oposición, yo digo que mi trabajo me fastidia porque no tengo nada para hacer. Me gustaria ser como aquella persona para poder disfrutar de ello.
Esta situación hoy me puso mal de nuevo. Llegué a casa y me acosté a dormir casi cuatro horas. Me pasé la mañana deseando el momento de estar descansando o al menos poder estar afuera.
Por suerte ya llega el fin de semana que es cuando más gente hay dando vueltas.
También se acerca mi partida, asi que no tengo que quejarme, pero la verdad que me agobia el tiempo que paso encerrada sin clientes que atender.
Lo único emocionante fue que la computadora no funcionaba y llamamos a un técnico que me encanta para que solucione el problema. Ahí charlamos un rato y después se fue. Pero es tan lindo!
Por suerte, me desperté con energía y me fui a hacer un poco de gimnasia lo cual me agregó un plus de pilas.
Cuando llegué a la casa me tocaba limpiar asi que eso hice y después me quedé en la habitación de las brasileras riendome un poco. Y para contrarrestar la rutina, ya planeamos algunas cosas para este fin de semana!

0 comentarios: